TZUCACAB 17
SEPTIEMBRE. A poco más de 15 días de la
administración municipal, habitantes exigen al alcalde Javier Cuy Canul
garantizar la seguridad de las familias Tzucacabences, ya que solamente está
disponible una patrulla para cerca de 15 mil habitantes.
El pasado fin de semana se evidenció la falta de
equipamiento y vehículos oficiales para patrullar los diferentes sectores de la
población y atender los reportes de emergencia; una sola patrulla se encargó de
recolectar a más de una decena de rijoso por las fiestas patrias, los
uniformados pasaron serios apuros para trabajar adecuadamente.
Como se sabe, desde los viernes por la tarde empieza el
trabajo fuerte de los elementos de seguridad en los municipios del interior del
estado, en el Sur principalmente se atiende por apoyo familiar, vecinos que
llegan alcoholizados de su trabajo y se portan prepotentes y agresivos con sus
parejas e hijos.
Desgraciadamente, después de que fueran vandalizadas el
palacio municipal y patrullas de Tzucacab, la autoridad que dirigía Danny Balam
improvisó una estrategia y patrullaban las calles con vehículos particulares,
en tanto se resolvía el problema de la falta de unidades oficiales.
A poco más de 15 días del inicio de la administración Perredista
dirigido por Javier Cuy Canul, los Tzucacabences se sienten inseguros y
temerosos por el levantamiento de varios grupos vandálicos, principalmente en
las colonias Guadalupe y la Placita.
“Es increíble lo que está pasando en el departamento de
policía, solamente está disponible una patrulla para todo el pueblo; la
“chinga” fue este fin de semana, cuando apenas nos quitábamos de un reporte y
ya nos ordenaban ir a otro lado del pueblo para verificar otro reporte. Una
patrulla está varada por falta de una banda en el motor y no piensan repararlo”
confirmó un elemento de la corporación municipal.
Cabe mencionar que la situación de seguridad se va
agravando a medida que va transcurriendo la administración municipal, esto como
resultado de tener a un civil al frente de tan importante área para el
Ayuntamiento y rechazar un mando de la Secretaria de Seguridad Pública del estado.